Es una cosa que me inquieta y me tiene preocupado, que nos deparara el señor presidente Zp, y es que este hombre es ante todo un líder nato.
Convencería a un nómada a comprar cantos en desierto. Dice que la crisis no es tal, pero yo trabajo en el comercio y lo veo a diario. La gente esta asfixiada por las subidas de las hipotecas y el bajo poder adquisitivo de los sueldos. Los clientes cada vez son menos y se cumple aquello “de los ricos cada vez más ricos”. La gente humilde ve como todo sube de precio y su vivienda que parecía ser un valor de ahorro se convierte en una pesada carga.
Sin embargo el presidente desprestigia a las instituciones económicas que critican su gestión y habla de antipatriotismo.
Tenemos un señor en la Moncloa que lejos de ver las nubes de tormenta y poner solución, prefiere mojarse con un inquietante optimismo...
La solución a un problema siempre es reconocer que lo tienes lo primero y este señor vive en Zapaterolandia un mundo feliz donde no pasa nada.
Lo ingrato de la situación es temer por el bienestar de los tuyos, el paro se ciñe como un fantasma a la gente y el desanimo se vuelve una pesada carga. Alguien que viva a muchos kilómetros de España si escucha al presidente de nuestro país. Vera que es como ver uno de esos anuncios del canal telé venta. “Llame ahora y podrá disfrutar de nuestra excepcional oferta, un país sin crisis, ni paro. De se prisa no durara mucho la oferta”
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